El templo estuvo casi colmado de personas que acompañaron con su presencia un recodatorio que está vigente desde 2019. Cada 17 de julio la iglesia riojana celebra la memoria litúrgica de los cuatro Beatos Mártires: Monseñor Angelelli, los sacerdotes Carlos Murias y Gabriel Longueville y el laico y padre de familia Wenceslao Pedernera.
Este año, el Padre Obispo, Dante Braida, recordó que «ser cristiano implica abrazar la vocación que Dios nos ha dado y verla como servicio, siempre junto a los demás». El obispo instó a la comunidad a reflexionar sobre su papel en la sociedad y en la familia, preguntándose: «Si hay una familia que está en situación de conflicto, ¿qué podés hacer? ¿Qué podés ayudar? ¿Cambiar la situación? ¿Cuánto nos ayudas?».
El obispo también resaltó la responsabilidad de aquellos que tienen roles significativos en el trabajo, en las instituciones y enfatizó la importancia de acompañar y apoyar a quienes tienen responsabilidades para que puedan cumplir bien su misión y tarea, buscando siempre el bien común y el beneficio de los más alejados.
«La vida y la santidad se realizan en lo cotidiano, abriéndonos más a Dios, pero también trabajando con otros y sirviendo a los demás en la tarea que nos toca», afirmó Braida. En su mensaje, destacó la diversidad de vocaciones representadas por los mártires riojanos: «Los cuatro mártires son distintas vocaciones, y cada uno desde su vocación nos enseña a entregarnos totalmente a los demás. Ojalá que toda la familia católica pueda iluminarse para entregar totalmente a los demás como lo hicieron ellos, sirviendo a Dios y a la comunidad», expresó el obispo.
En la celebración hubo varios momentos de mucho afecto como las ofrendas que se presentaron en el altar y que representan a nuestros mártires beatos. También, la hermana Silvina Vargas expresó su alegría porque este sábado profesará sus votos perpetuos en la Iglesia Catedral. La hermana, pertenece a la congregación de las Hermanas de la Virgen Niña. Acompañamos a Silvina en este momento importante de su vocación y que Dios bendiga su vida y entrega puesta al servicio de toda la Iglesia.

Luego de la celebración de la Misa se realizó la procesión conmemorativa por nuestros Beatos Mártires alrededor de la Plaza 25 de mayo.